Plaza del Tío Remundaina. La Garganta |
Es el conjunto de tradiciones, artes y costumbres de un pueblo.
El término fue propuesto en 1846 por el arqueólogo británico William John Thoms en un artículo de la revista inglesa Athenaeum, para denominar los «tesoros de la literatura popular, tales como historias, cuentos, mitos y proverbios». Apareció por primera vez en el diccionario de la Academia en 1925 con la grafía folklore, y solo en 1970 se adoptó la forma actual folclore.
Se trata de una palabra compuesta formada por el vocablo germánico prehistórico folkam 'pueblo', 'gente' y la forma verbal del inglés arcaico lore 'aprender'. De la antiquísima folkam se derivaron el alemán moderno Volk 'pueblo', presente en Volkswagen 'vehículo del pueblo', y el danés y sueco folk. Se cree que estas palabras están vinculadas a la base indoeuropea pel- 'llenar', de la cual también habría surgido el latín populus, origen del vocablo español pueblo así como del inglés people.
Lore, la forma arcaica del verbo inglés learn 'aprender', se derivó de la base indoeuropea leis- 'sendero', 'camino', que lleva implícita, según muchos lingüistas, la noción de "ganar experiencia siguiendo un camino".
Fte: La palabra del día
Folclore -reconozco- es una palabra de mala prensa, quiero decir muy mal usada, pero creo que acierta mucho con el sentido conceptual de aquello que tendríamos que decir con varias y diversas palabras de raza hispana. Resume, pues, y aporta una visión más científica de la cosa.
En nuestro querido y amado país las folklóricas han sido la mejor imagen y estandarte de nuestra España cañí.
El tío Remundaina también fue un folklórico, se fue al parecer con alguna compañía de revista a hacer las américas.
El término fue propuesto en 1846 por el arqueólogo británico William John Thoms en un artículo de la revista inglesa Athenaeum, para denominar los «tesoros de la literatura popular, tales como historias, cuentos, mitos y proverbios». Apareció por primera vez en el diccionario de la Academia en 1925 con la grafía folklore, y solo en 1970 se adoptó la forma actual folclore.
Se trata de una palabra compuesta formada por el vocablo germánico prehistórico folkam 'pueblo', 'gente' y la forma verbal del inglés arcaico lore 'aprender'. De la antiquísima folkam se derivaron el alemán moderno Volk 'pueblo', presente en Volkswagen 'vehículo del pueblo', y el danés y sueco folk. Se cree que estas palabras están vinculadas a la base indoeuropea pel- 'llenar', de la cual también habría surgido el latín populus, origen del vocablo español pueblo así como del inglés people.
Lore, la forma arcaica del verbo inglés learn 'aprender', se derivó de la base indoeuropea leis- 'sendero', 'camino', que lleva implícita, según muchos lingüistas, la noción de "ganar experiencia siguiendo un camino".
Fte: La palabra del día
Folclore -reconozco- es una palabra de mala prensa, quiero decir muy mal usada, pero creo que acierta mucho con el sentido conceptual de aquello que tendríamos que decir con varias y diversas palabras de raza hispana. Resume, pues, y aporta una visión más científica de la cosa.
En nuestro querido y amado país las folklóricas han sido la mejor imagen y estandarte de nuestra España cañí.
El tío Remundaina también fue un folklórico, se fue al parecer con alguna compañía de revista a hacer las américas.