Uno de estos argentinos de izquierdas que todos conocemos me pasa una de esas sentencias definitivas, que decía algo así:
Solo debemos tener miedo de los idiotas, porque son muchos. Y como son tantos pueden elegir a nuestros gobernantes.
Y así es como la cagamos, por no saber hacer frente a los imbéciles. Siguiendo con la cosa uno ve que los gobernantes se acostumbran a tratar con idiotas, que es su público natural, lo que les mola. Son los que compran el producto, les gusta y se lo creen. Por eso nos tratan como nos tratan, porque les va bien y les damos poderosas razones para que sigan asi. Luego, claro, adulan al pueblo para dar valor a sus politicas con los tópicos que hemos escuchado muchas veces:
La inteligencia del pueblo, la fiesta democrática, patatín patatán.
El ciudadano sabe lo que quiere, no se deja manipular y cosas por el estilo.
Como digo, es para tener miedo. Los idiotas son invencibles.
Claro que nosotros no somos tan listos, porque lo aguantamos y no nos reproducimos. Nos despoblamos.
Claro que nosotros no somos tan listos, porque lo aguantamos y no nos reproducimos. Nos despoblamos.