martes, 27 de marzo de 2012

Al Cáucaso (Lermontov) / Кавказу - Лермонтов М.Ю.

Elbruz. 5642 m. Kabardino-Balkaria. Rusia

(1830)
Кавказ! далекая страна!
Жилище вольности простой!
И ты несчастьями полна
И окровавлена войной!..
Ужель пещеры и скалы
Под дикой пеленою мглы
Услышат также крик страстен,
Звон славы, злата и цепей?..
Нет! прошлых лет не ожидай,
Черкес, в отечество свое:
Свободе прежде милый край
Приметно гибнет для нее.

Esta poesía me la aprendí de memoria, todavía la recito, junto con otras tres o cuatro más del mismo autor. 
Mi repertorio estaba compuesto por poesías de Mijail Yúrevich LERMONTOV (la que encabeza esta entrada) otras de Pushkin y  otras de contemporáneos como Mayakovski o Ajmátova. Las veladas con stijotvorenya (recitales poéticos) y/o bardi (cantautores, generalmente con guitarra) a las que era regularmente invitado solían ser algo bastante común en aquellos tiempos, veladas informales acompañadas de espirituosos que transgredían la noche y que podían confortablemente rematarse con baños prohibidos en las simas termales del Praval, en el vientre del Mashuk. 

En una de esas veladas -quizá la más seria y protocolaria- realizada en un centro cultural con alfombra roja y ese típico estilo kistch tan soviético en su decoración, fui obsequiado con un precioso medallón de bronce grabado dedicado a la amistad imperecedera de los pueblos. Ese regalo lo conservo como un tesoro.

Del primero de los autores rusos, Lermontov, que presumía de tener ancestros hispanos -del mismo modo que Pushkin, abisinios, en este caso verdaderos- es indispensable destacar su gran obra en prosa El héroe de nuestro tiempo. Pechorín, su protagonista, es en realidad el trasunto del héroe nihilista que él encarnó en vida y que supo predecir con su propia muerte en un duelo en la ciudad de Pyatigorsk, la ciudad balnearia.
Dejó ciertamente un cadáver joven pero su leyenda, imborrable, está asociada a estas tierras del Cáucaso, las montañas de las que se enamoró, al igual que de sus indómitos pobladores.

NOTA: Cómo lo traduces tú Uzkudun?

2 comentarios:

  1. Vale, vale. Ya sabemos: Da, da,da,da,da, eto Kavkaz!! También me la he aprendido y esa otra más excelsa de Gamzatov "Zhurabli" cuando las grullas regresan...

    Poka!

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